martes, 5 de abril de 2011

Charly


Me resulta difícil pensarlo y más empezar a escribirlo pero ahí vamos, el decir es constant concept.

Charly García me dió más que casi cualquiera en esta vida aún conociéndolo poco personalmente. La música puede dejarte aprender casi acerca de cualquier cosa si estás atento y sabes mirar.

Say No More es un concepto que marcó mi adolescencia allá por 1994, inclusive antes de salir el disco en 1996. Charly lo venía maquinando y aplicando a su vida cotidiana y con @2culosenelbidet íbamos como unos locos a intentar infiltrarnos dentro del planeta García.
Se me cruzaban las ideas, los colores iban apareciendo y entre el aerosol y la psicodelia musical aparecían frutos que alimentarían mi ser para siempre.

Lograr entrar a la casa del flaco fué tremendo, ver sus cosas, tocarlas, sentarnos en su sillón gracias a Javier mientras el dormía una siesta. Esperar a que despierte y darle su regalo de cumpleaños (vinilo y habano), llevar sus instrumentos hasta Júpiter, boliche ubicado en su momento en el paseo debajo del alto palermo, esperarlo junto con otros grandes maestros como Pappo o Hilda, o María Gabriela Epumer... ese día terminamos comiendo torta a las 7 de la mañana, Charly, Pappo, Hilda, María, Pipo, Samalea, Black Amaya, una prima de Charly, una novia, dos desconocidos, @2culos y yo. Con 16 años esa es una experiencia increíble.
Una vuelta (ya tenía 20) fui con mi novia en esa época. Me puse a tocar en la puerta de su edificio Nowhere Man de The Beatles y justo salió García a la calle y morí de verguenza e inmediatamente dejé de tocar y lo miré. "Seguí" me dijo, y por supuesto no me quedó otra y la seguí tocando mientras el metía unos coros por ahí.
(Pido disculpas si voy y vengo en el tiempo pero fiel a mis formas de contar lo que quiero contar voy escribiendo mientras voy recordando o mientras voy sintiendo y viendo los recuerdos aparecer.)
Una vuelta con @2culosenelbidet y su primo "Feno" lo seguimos en auto varios kilómetros hasta perderlo y perdernos.
Otra fué cuando se iba y subimos a un taxi con varios desconocidos y al grito de "siga ese auto" también lo perseguimos aunque esa vez lo alcanzamos y llegamos a el club del vino, en donde Javier nos hizo entrar a las primeras mesas.
Me acuerdo también el día de su cumpleaños número 45, tocaba en Danzón, un bolichito en palermo a unas 15 cuadras de la que era su casa en Coronel Díaz 1905 7mo 15. Ese día fué fantástico también ya que era chiquito el lugar, éramos pocos y en cuanto se olvidó un acorde y preguntó en qué empezaba el tema pude decirlo y entrar de alguna manera... ese día también participamos de un monólogo de Charly respecto de la psicología y en el que le escribió toda la carpeta que llevaba encima @2culos para demostrar su teoría. Un genio.

Varias veces más pasaron como estas pero lo importante para mi es como marcó mi vida Charly García. Su concepto mas allá de su genio que por ser tal es Ego y locura por mil, su música de siempre, todas sus bandas, canciones como Natalio Ruiz, Bubulina, Eiti Leda, Perro andaluz, Desarma y sangra, Piano Bar, Reloj de plastilina, Kill my mother entre muchísimas... la música en Charly García me partió la cabeza.

Tirarse de un noveno piso y salir ileso, tomar una botella de whisky, fumarse uno y tomarse un par de rayas y sin embargo no poder contener al genio, pegarle a un periodista porque le estaba rompiendo mucho las pelotas... eso es rock, banquesela el que no lo soporte o mire para otro lado.

García jamás se arrepintió de nada y de hecho, volvería a hacerlo y por eso es que nada de penas en la vida Say No More.

La "resurrección" de Charly me regaló canciones que nunca había escuchado en vivo y un recital distinto a los de siempre. Fué increíble. Quienes fueron siempre a recitales del loco sabrán de qué hablo.

Aprendí a pensar y encontrar caminos en mi desde su música, a Charly García le debo parte de lo que soy.
Su antena le dió canciones que el supo traer a la realidad y que yo supe interpretar e internalizar como las mejores enseñanzas de mi vida.

4 comentarios:

  1. La admiración por el artista, el respeto y la voluntad, en convinación perfecta.
    Envidiables anecdotas

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  2. Como siempre sublime, increible que dentro de una sola persona puedan vivir La Vaca y vos.

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  3. sabes que me da como cierta envidia sana
    se conoce tu pasion por la musica y compartir cosas con semejante genio debe ser un flash total
    siempre quise saber, qeu carajo escuchara charly para colgarse y disfrutar de la musica?

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